Imponente es nuestro lema para el año 2022.
Estamos viviendo sin duda tiempos difíciles en todo el mundo. Además de la pandemia en todas partes de la tierra, oímos constantemente sobre desastres naturales, huracanes, incendios, sequías, terremotos y muchas cosas más que nos dejan ver las señales de tiempos que la Biblia anunció que acontecerían.
En medio de todo este caos, la Iglesia juega un papel muy importante ya que es la representante de Dios en la tierra y por lo tanto debe tomar el lugar que Dios quiere que desarrolle. El libro de Cantares es una recopilación de cantos de amor entre el Amado (Cristo) y la Amada (la Iglesia) y nos muestra cómo el Señor ve a su iglesia en el último tiempo. Este pasaje nos da luz a las siguientes facetas que debemos desarrollar como iglesia y como Misión bajo dirección Apostólica en este año 2022:
La Iglesia debe mostrarse radiante como el sol. Lo que esto nos enseña es que la Iglesia debe resplandecer con la luz de Dios a los que están en tinieblas. Hoy más que nunca los creyentes debemos aprovechar para compartir con las personas inconversas de la luz de Cristo. Que la luz de Dios les resplandezca para salvación.
A la Iglesia se le compara, entre otras cosas, con un ejército de soldados. Aunque estas comparaciones no son literales, tiene algo valioso que enseñarnos.
Está claro que la iglesia es un ejército que debe saber como pelear batallas espirituales, con armas dotadas por el Espíritu para destruir toda fuerza del mal que se levante contra su pueblo.
Un ejército tiene: Una misión, disciplina, armas, estrategias y victorias
La Biblia nos dice que la Iglesia que Cristo vino a establecer en la tierra iba a ser una iglesia imponente. Es decir, la Iglesia prevalece a pesar de todos los ataque del diablo que tiene que soportar y que además no vuelve atrás semejante al León de la Tribu de Judá que es Cristo. Por lo tanto, vemos como la Iglesia es descrita como imponente que ni las puertas del Hades prevalecen contra ella. De la misma manera que la Iglesia del principio aún en la persecución se mantuvo firme en su fe, así la Iglesia actual debe permanecer firme predicando el evangelio de Jesucristo por toda la tierra.
El arrebatamiento plantea el momento más glorioso para la Iglesia. Allí se pasará de la Iglesia militante a la Iglesia triunfante. Una iglesia gloriosa que alzará vuelo como el águila para remontarse al cielo y reunirse con su amado... Jesús. El águila edifica su casa en lo alto y seguro.
Se remonta a las alturas. Se renueva. Tiene una visión aguda.
Horarios de Servicios
Martes
Jueves
Domingo
7:30 PM (Oración)
7:30 PM
8:30 AM & 11 AM